Si ayer fue un día perfecto, hoy todo lo contrario, la mañana empezaba preciosa, pero..................como casi todos los días, se ha torcido.
La temperatura sigue siendo fresquilla, y en los puertos hace frío, me tengo que abrigar bastante, por que si no, me quedo como un churro.
Si en alguna etapa anterior me he quejado de subir un puerto jodidillo, en ésta, ha sido ración doble, he subido dos puertos y a cual peor.Aunque han caído dos chaparrones gordos, no me ha pillado ninguno, y es que ya voy aprendiendo, y a la mínima oportunidad de resguardarme bajo techo, no me lo pienso, si te pasas, luego no encuentras nada en muchos kilómetros, por lo tanto es mejor pecar de segurola y ante la proximidad de nubarrones, mejor ponerse a cubierto cuanto antes.
En el segundo chaparrón, ya estaba en Konya, es una ciudad bastante grande, por lo tanto, no he tenido ningún problema para resguardarme.
Llevo cincuenta y ocho días de viaje, he pedaleado cincuenta, pues me ha llovido, nevado o granizado, en veintisiete días, ya esta bien ehhh. Hoy al ser domingo, muchos turc@s, han subido a la sierra, con sus coches a hacer barbacoas, les debe de encantar por que a pesar de que el día no era el mas apropiado, había muchisimas familias, a las orillas de la carretera, con las parrillas, asando carne.
Y esta señora, se ha emperrado, en que le dejase montar en FLAVIA; y al suelo que se ha ido.
Lo mejor del día, es que me he encontrado con el primer ciclista en Turquia, hemos charlado y era majo.
Entre los domingueros de la sierra, y los de los bodorrios, me han dado el día, me habrán hecho media docena de adelantamientos, de los de bajarse de la bicicleta y liarse a ostias.
Por esta zona, ya se empiezan a ver, camiones cuya carga, casi toca el cielo, dan miedo cuando te sobrepasan y ves toda la carga inclinada hacia tu lado, de verdad, impresiona. Y también es muy habitual, ver a tres tíos jóvenes, montados en la misma motocicleta. Aquí la poli de trafico, pasa de todo, ah, y hay cantidad de gente, que en las autovías va dirección contraria, y a nadie le extraña, joder, ¡¡¡y nos quejamos de lo que se ve por nuestras carreteras!!!.
Y fijaros con que cariño, pasea éste, a su pareja, vistas inmejorables, brisa en la cara, lo que no sabeis, es que la lleva al campo, la deja currando todo el día, y él mientras, en la tasca, charlando con los amigotes.
Bueno majos, otro día mas, pero este para olvidar, por que el recorrido tampoco tenia mucho para ver.
Cuidaros.
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